«Como presidente quiero expresar de manera precisa que cada metro cuadrado del canal de Panamá y su zona adyacente es de Panamá y lo seguirá siendo» sentenció el presidente Mulino.

El presidente panameño, José Raúl Mulino, respondió el domingo a las declaraciones del futuro mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, que demandaban la «devolución» del canal que conecta los océanos Atlántico y Pacífico si no se cumplen los principios de su funcionamiento.

LEA TAMBIÉN:

Organizaciones sociales rechazan amenazas de Trump de despojar a Panamá de su canal interoceánico

“Como presidente quiero expresar de manera precisa que cada metro cuadrado del canal de Panamá y su zona adyacente es de Panamá y lo seguirá siendo: la soberanía e independencia de nuestro país no son negociables”, sentenció Mulino en un comunicado a la nación panameña.

La alerta se refiere a las críticas de Trump el sábado pasado respecto a supuestas tarifas desmedidas a los barcos estadounidenses y a la gestión del Canal de Panamá, después de las cuales amenazó con demandar su «devolución» a su nación si no se cumplen los principios éticos y jurídicos, según agencias de noticias globales.

El presidente panameño enfatizó que el principio de soberanía nacional “cada panameño, aquí o en cualquier lugar del mundo, lo lleva en su corazón y es parte de nuestra historia de lucha y una conquista irreversible”.

Asimismo, no olvidó que los Acuerdos Torrijos-Carter de 1977 establecieron la disolución de la antigua región del Canal bajo control de Estados Unidos, reconociendo la soberanía de Panamá y la cesión total del Canal a Panamá, que culminó el 31 de diciembre de 1999.

“Desde entonces no hubo gestiones ni reclamos, al contrario, ha sido motivo de fuerte apoyo internacional y orgullo nacional”, declaró Mulino, quien garantizó que la vía acuática funcionó y se expandió por decisión de Panamá y hoy es un enorme recurso que contribuye a la economía con miles de millones de dólares anuales.

Por otra parte, el presidente de Panamá añadió que los acuerdos “también establecieron la neutralidad permanente del Canal, garantizando su funcionamiento abierto y seguro para todas las naciones, tratado que ha obtenido la adhesión de más de 40 estados”.

“Cualquiera posición contraria carece de validez o sustento ante la faz de la Tierra”, enfatizó Mulino.

“Nuestro canal tiene la misión de servir a la humanidad y su comercio, ese es uno de los grandes valores que los panameños ofrecemos al mundo, dándole garantía a la comunidad internacional de no tomar parte ni ser parte activa en conflicto alguno”, subrayó.

De igual manera, precisó que “desde que está en manos panameñas el Canal creció, es administrado por profesionales idóneos, quienes con reglas claras se encargan de su funcionamiento, conservación y mantenimiento, asegurando su operación segura, continúa, eficiente y rentable”.

El canal fue realizado a inicios del siglo pasado por compañías estadounidenses, poco después de la separación de Colombia, el 3 de noviembre de 1903, estuvo bajo el control de Estados Unidos, junto con las áreas circundantes donde poseía 14 bases militares, hasta 1999.

La transmisión se originó del acuerdo suscrito en 1977 entre el líder panameño, general Omar Torrijos, y el presidente James Carter, después de años de intensos convenios.

EN ESTA NOTA: